El reparador de roscas interiores NES26 es una herramienta versátil y robusta, especialmente diseñada para restaurar y limpiar roscas interiores que han sufrido daños por óxido, golpes o la acumulación de rebarbas.
Esta herramienta está equipada con cuchillas RK26-60G y RK26-60F, que están incluidas en el set, permitiendo que el reparador funcione con alta precisión y efectividad.
Una de las características más destacadas del NES26 es que no es necesario medir la rosca antes de su uso, lo que facilita y agiliza el proceso de reparación.
La herramienta es ajustable rápidamente a cualquier diámetro o paso, lo que la hace ideal para trabajar con una amplia variedad de tamaños de roscas.
Además, el reparador sigue automáticamente la rosca existente, reparando los daños sin necesidad de una intervención manual constante, lo que asegura un resultado consistente y de alta calidad.
Su construcción robusta asegura durabilidad y una larga vida útil, haciendo del NES26 una herramienta indispensable en cualquier taller o entorno industrial donde las roscas sean comúnmente utilizadas y requieran mantenimiento o reparación.

Recomendaciones de uso:
Asegúrese de limpiar la rosca de cualquier suciedad o residuo antes de usar la herramienta para evitar daños adicionales.
Ajuste la herramienta correctamente al diámetro de la rosca antes de iniciar el proceso de reparación.
Aplique una ligera presión al inicio del proceso para garantizar que la herramienta siga correctamente el camino de la rosca.
Evite aplicar fuerza excesiva durante el uso para evitar dañar las cuchillas o la rosca que está reparando.
Utilice lubricante en la rosca si es necesario para facilitar el proceso de restauración y reducir el desgaste de las cuchillas.

Recomendaciones de mantenimiento:
Limpie la herramienta después de cada uso para remover cualquier residuo metálico o suciedad acumulada que pueda afectar su funcionamiento.
Revise periódicamente las cuchillas (RK26-60G y RK26-60F) y sustitúyalas si están desgastadas o dañadas para asegurar un rendimiento óptimo.
Almacene la herramienta en un lugar seco y protegido para evitar la corrosión y prolongar su vida útil.